El Jardin de Gandhi

El invierno

 

Dentro de casa

1. En esta época del año los días son más cortos, es por eso que tus plantas necesitan la mayor cantidad de horas de sol posible. Una buena estrategia es acercarlas a la ventana para que se asoleen más. No te olvides de irlas girando paulatinamente, así no se van en vicio buscando la luz.

2. Si además sos de esas personas friolentas que ponen la calefacción al máximo (¡ni te digo si tenés loza radiante!), sabé que tus plantas van a necesitar que las pulverices seguido para aportarles la humedad que tanto necesitan (ojo, no pulverices las flores, que se marchitan). Si vas a mantener la casa calentita, por lo menos tratá, por el bien del mundo vegetal, de que la temperatura se mantenga estable. Y en la medida de lo posible, alejá los ejemplares de los calefactores. Sino los vas a cocinar.

3. Podés plantar flores de pascua y azaleas en una misma maceta. Como ambas necesitan acidez en el suelo y una relativa humedad, pueden convivir.

4. Podá los ejemplares que tienen aspecto larguirucho y débil.

5. No te olvides de limpiar el polvo de las hojas.

6. Aboná y regá los ejemplares en flor. Para abonar conviene sacar la primera capa de tierra de la maceta y reemplazarla por una nueva de turba.

7. El riego para las plantas en flor tiene que ser frecuente (azaleas y ciclámenes, por ejemplo). Al resto regalas poco, es su época de reposo.

8. No te olvides de retirar las hojas y flores marchitas.

9. Si las hojas amarillean puede ser que esté faltando hierro.  Podés abonar un poquito con un fertilizante con hierro, pero apenitas, porque si no quemás las raíces. Como una buena opción para no pasarte podés clavar un clavito en la tierra. ¡No valen los inoxidables! Y usá guantes, no va a ser que te pinches y te agarres tétanos.

 

Al aire libre

1. -No te excedas con el riego, porque podés pudrir las raíces. Acordate de que las plantas están en reposo, es decir muy poco o para nada activas. Dejalas descansar, porque en primavera van a tener trabajo de sobra. Antes de regar las plantas verdes (de hoja) asegurate de que la tierra esté seca. Y si vas a hacerlo, hacelo mientras haya sol, nunca por la tarde, así el agua después no escarcha.

2. (Tip: Las azaleas van a florecer por mucho más tiempo si mantenés el sustrato bien mojado.)

3. -Si vivís en el campo en donde a la noche hay heladas, algunas de tus plantas pueden necesitar algo de protección extra contra el frío.  A ellas las podés proteger con cubiertas de plástico, que ayudan a generar un efecto invernadero.

4. -Además, nunca está de más proteger las raíces de tus plantas con algún tipo de mulch: puede ser de chips, de paja, de pasto o de lo que vos prefieras. Su propósito es fomentar el crecimiento de la raíz, por el “calor” que aporta el mulching, y desacelerar el crecimiento de las partes aéreas, desmotivadas por el frío. También podés poner turba, que protege y además tiene el beneficio de que cuando pasa el invierno le sirve a la planta de abono.

5. Otra forma de proteger las herbáceas de los fríos más intensos es podarlas casi al ras, para que rebroten con fuerza en primavera. La menta y el orégano son súper candidatas para esto.

6. Además es LA época del año para hacer  una poda de formación y rejuvenecimiento de los arbustos, sin contar a aquellos que tienen una floración temprana.

7. Aprovechá la época de reposo para tutorar las especies que estén torcidas.

8. Eliminá los insectos que sobreviven al invierno fumigando las plantas. Supuestamente las plagas mengúan con estos fríos, pero a mí se ve que los pulgones y las cochinillas me quieren mucho, porque no se van por más que los eche.

9. En invierno, justamente porque es tiempo de descanso, es época ideal para plantar ejemplares a raíz desnuda de árboles, rosales y arbustos caducos. Justo antes de plantar, regalos bien o metelos un rato en un balde con agua. Plantalos en un día seco, nunca después de una lluvia abundante. El ejemplar debería quedar enterrado justo al nivel del cuello (unión del tronco con las raíces) y nunca más abajo. Si tapás el tronco, corrés el riesgo de que se pudra. Y si querés plantar coníferas, también es el momento de hacerlo.

10. Para los que tienen jardín, es un buen momento para instalar sistemas de riego por aspersión, gracias a que el césped está en descanso.

 

Plantas en maceta

1. El invierno es la estación para renovar la tierra de tus macetas. Así, si lastimás las raíces al cambiar el sustrato, las plantas tienen tiempo de reponerse antes de la primavera. Esta tarea deberías emprenderla cuando las plantas florecen menos y cuando las hojas pierden su color y empiezan a caerse. No ahorres en tierra, es la única que tienen las plantas de maceta para buscar su alimento. Fijate que sea negra y fértil, con humus, lombricompuesto o compost. Y agregale perlita para un buen drenaje. No te olvides de poner leca en el fondo, también para lo mismo.

2. Podá las trepadoras: descartá las ramas secas y tutorá bien las ramas que conserves, así arrancan la primavera chochas  Además te sirve para mantenerlas a raya.

3. Para la gran mayoría de las plantas que están dormidas o en reposo, es buena época para hacer trasplantes. Una vez leí una comparación que me pareció muy adecuada: trasplantar y podar plantas cuando están en reposo, es como operar una persona cuando está anestesiada: no sufre y no le duele. Por esa misma razón  es tiempo también para cambiar los árboles de lugar, si es absolutamente necesario. ¡Tarea titánica si las hay!

 

​Podas

1. El invierno es tiempo de podar, sobre todo los ejemplares de hoja caduca, que entran en reposo.Por ejemplo, árboles frutales y rosales.

2. Siempre usá herramientas bien afiladas. El corte tiene que ser por encima de las yemas y en un ángulo tal que permita que el agua escurra. Si la lastimadura es muy grande, siempre podés ponerle por encima la cera derretida de una velita, para proteger a la planta de los hongos.

3. Tampoco hay que podar las plantas que florecen en primavera porque te quedás sin flores. Así de simple. Tenés que podarlos después de la floración, a fines de la primavera y principios del verano. A los árboles y arbustos que florecen en otoño e invierno podalos después de la floración y hasta fin de la primavera. Las ramas que están feas, secas o que crecen a contramano (mirando el tronco) o que tienen alguna malformación (frutos y flores incluídos) sacalos en cualquier momento del año.

 

Siembras de invierno

 

Alhelí, amapolas, arvejilla de olor, caléndula, claveles y clavelinas, conejitos, ¡crisantemos!, fresias, gerbera, lupinos, pensamientos, prímulas, violetas.

 

En invernadero

Azaleas, begonias, cyclamen, crisantemos, dahlias, dracena, fuschia, gardenia, geranios, hibisco, manzanilla, orquídeas, pasiflora, petunia, salvia y verbena.

 

Bulbos

Agapanto, amaryllis, anemonas, azucena, calas, ciclamen, dahlia, gladiolos, hemerocalis, iris, Jacinto, muguet, narcisos, nardos, peonías y tulipanes.